jueves, agosto 17, 2006

Viejas de supermercado

No son roedores, ni microorganismos, no contaminan lo que comemos pero nos rallan la cabeza de manera que cualquier cosa que compramos nos caiga mal, cuando pierden su encanto femenino y uno ya las cree acabadas entran en su edad mas peligrosa para el resto de la humanidad, son las viejas de los supermercados.
Uno llega al supermercado con el tiempo contado o cansado despues de un dia agitado, y las ve pululando por distintas partes, tocando todo lo de la verdulería, apretando los tomates para ver si estan maduros y cuando ven que realmente lo estan no los quieren porque ya estan machucados por ellas mismas.
Una de las cosas que mas detesto es cuando estan en la carnicería, y se apoyan en el mostrador tapando la cristalera con los precios de las carne, parece que estuvieran esperando en la barra a que el carnicero les ponga un gin tonic. Luego les toca el turno a ellas, y como ya tienen cierta confianza con el empleado se ponen a contar sus cosas y a hablar de toda su familia, explicando el motivo por el cual compran cada cosa ( dame esas costillas de cerdo porque hoy viene mi hijo a comer y les gusta los guisos que preparo... etc) ¿¡¡No se dan cuenta de que el carnicero les sonrie y les sigue la corriente porque es su trabajo!!?
Uno quiere pasar por un pasillo pero se encuentran con otros seres de su especie por lo que tienen que parar a hablar y criticar a todos los que conocen obstruyendo el paso para quien el tiempo es un recurso escaso.
Y por ultimo lo peor, la cola para la caja. Hay algunas que estan a la expectativa de meterse delante de uno si hay mucha gente, por lo que uno tiene que ver bien a quien tiene adelante. Y como le discutamos que estabamos nosotros primero empiezan a gritos demostrando que todavia no son viejas y que para eso estan en la flor de la vida.
Todos vamos a ser viejos alguna vez, algunos ya podriamos hablar en presente, pero esta gente quizas no se merece ese calificativo, porque todavia estan con mucha vitalidad.
Les toca el turno a ellas, entonces empiezan a pasar todo por la caja, pero se equivocaron y no era eso lo que querían, por lo que tienen que ir de nuevo a buscar el producto que querían.
Y a la hora de pagar estamos expuestos a varias cosas: puede ser lo anterior, ponerse a dar la lata a la cajera que encima de no tener que equivocarse con el dinero, tienen que escuchar simpaticamente sus estupideces, o si no puede pasar que tengan que ponerse a buscar monedas y billetes para darle justo haciendose un lio, cuando no que se pongan a discutir con la cajera por lo que hay cobrado en el ticket.
Los supermercados son un invento del consumismo, todo esta montado de una manera que compremos mas de lo que necesitamos.
¿Sera entonces que las viejas de los supermercados son algo que contribuye al equilibrio de la economía quitandonos las ganas de comprar?